Periodismo carroñero no ayuda a que se levante Acapulco

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El paso del huracán Otis por las costas de Guerrero de hace unos días ha dejado al menos 46 personas muertas, alrededor de 58 desaparecidas, además de dejar a su paso infraestructura colapsada, viviendas destruidas y más de 600 mil afectados; sin embargo, la oposición al gobierno de la Cuarta Transformación así como los medios de comunicación contrarios a la actual administración federal, lejos de ayudar para levantar uno de los principales puertos turísticos del país como es Acapulco están dispuestos a sacar raja política de la tragedia.

Los ataques a la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador aparecidos en medios impresos, así como en la radio y la televisión, y en redes sociales, no tienen precedente en la historia de México.

La sesgada cobertura de los daños provocados por el fenómeno natural en las costas del Pacifico, los comentarios sobre la desatención a las víctimas, los supuestos abusos de los integrantes del ejército, los reclamos por la desaparición del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), un fideicomiso que destinaba recursos para este tipo de emergencias, y la campaña de desánimo para que los mexicanos no salgan a donar a las víctimas del fenómeno natural de Guerrero, es equiparable al manejo de información en una guerra, tal cual como las que están vigentes ahora mismo en otras regiones del mundo.

Los grupos políticos y medios de comunicación que han emprendido esta cruzada contra el gobierno de la 4T no están solos, detrás de ellos hay una organización respaldada tanto por recursos monetarios, como por estrategias mediáticas de campañas negras, de organizaciones internacionales que tienen oscuros intereses económicos.

Para algunos analistas este tipo de campaña mediática que está realizando la oposición se puede considerar como traición a la patria por parte de legisladores, lideres empresariales o medios de comunicación.

Existe un grupo que está detrás de esta campaña, azuzando el desastre y exigiendo muertos que exhibir en medio de la tragedia, todo con el objetivo de que la opinión pública le dé la espalda a la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador y puedan vencer a Morena en las elecciones del año que viene.

Los medios de comunicación a diario presentan noticias que no son ciertas y que se tienen que desmentir, sobre todo aprovechando la conferencia mañanera, pero no siempre se alcanza a demostrar la mentira.

Los adversarios al gobierno morenista no están tomando en cuenta que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) cuenta con mecanismos financieros de ayuda para la reconstrucción de Acapulco, que quedo devastado por el fenómeno natural., y que se tienen recursos para reactivar la economía del puerto turístico como son los bonos catastróficos y un seguro contra catástrofes.

La Secretaría de Hacienda informó hace unos días que si bien es cierto se extinguió el Fonden y se cambió la forma de manejar los recursos, “la cobertura de reserva no fue tocada. Actualmente se tienen 18 mil millones en un cajón conocido como Fonden, se cuenta con un bono catastrófico por 485 millones de dólares y además hay una línea presupuestal de cerca de 10 mil millones de pesos, que usualmente se incluye” y 5 mil millones de pesos en seguros catastróficos, que se contratan cada año, sin embargo, de esto no se habla en noticieros ni en periódicos, ni revistas y tampoco es noticia para los programas de radio y televisión.

Los medios de comunicación y la oposición tendrían que meditar su actuación y definir si esa andanada le conviene al país y si es una estrategia adecuada para ganar las elecciones del 2024.