“Civil War” y la cinta esencial de Alex Garland

El reconocido cineasta se llevó el reconocimiento del público gracias a Ex-Machina, un hito de la ciencia ficción.

Estamos en un mundo distópico, donde se ha desatado una terrible guerra civil amenazando a Estados Unidos, y tres periodistas harán un recorrido por el país para documentar su temible ascenso.

Tal es la nueva premisa de Civil War, la nueva cinta del exitoso cineasta Alex Garland, quien se ha destacado en el universo cinematográfico por propuestas de ciencia ficción sumamente provocadoras, que exponen a la mente del espectador grandes preguntas acerca de la naturaleza humana y los peligrosos avances de la ciencia y tecnología.

A pesar de que también lanzó otra cinta peculiar en Netflix, Aniquilación, que tenía a Natalie Portman como protagonista y nos hablaba sobre el tormento animal, creo que es particularmente importante hablar de el largometraje que llevó a Garland, y a la estrella de esta película, a obtener un estatus de culto entre la comunidad cinéfila: Ex-Machina.

La producción de 2014, escrita y dirigida por Garland, nos cuenta la historia de un programador (Donald Sutherland) que debe interactuar con una inteligencia artificial sumamente avanzada. Este experimento es un androide con rostro femenino (Alicia Vikander) que posee una sensibilidad e inteligencia sin iguales. No obstante, todo control se pierde cuando el androide descubre lo limitada de su naturaleza.

Las ovaciones por esta brillante producción no han cesando desde su lanzamiento, con especial mención al brillante guion construido por Garland. Es de entenderse: hay un profundo entendimiento por ambos roles protagónicos, y se trata el tema de la inteligencia artificial con realismo y sensibilidad, al mismo tiempo que obtenemos un final escalofriante más satisfactorio y creíble. Es una alegoría sobre cómo nuestra propia ambición puede consumirnos por completo, así como de el comprender cuáles son los elementos que nos hacen realmente humanos, fuera de nuestros atributos físicos.

Se siente como uno de los mejores episodios de Black Mirror, la serie antológica de Netflix sobre lo que puede pasar cuando nos dejamos llevar por nuestra ambición y por lo terrorífico que es no las herramientas per sé, si no el cómo las utilizamos para nuestro beneficio o para fines brutales.

Además, con el despegue de ChatGPT, una plataforma de inteligencia artificial capaz de crear imágenes, textos y diversos tipos de contenido multimedia, mensajes como los que Alex transmitió en su cinta son elementales para entender cómo ser cautelosxs con nuestro uso de fuerzas que no dominamos.

Sin duda habrá que seguirle el rastro a Alexander Garland, y ver qué nos tiene preparadxs con Civil War—ya un éxito con la crítica—y sus siguientes producciones.

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