Escenarios y alertas hacia las elecciones 2024
Advierto los siguientes escenarios y alertas hacia las elecciones 2024:
Escenario 1
Morena gana todas las elecciones con algo cercano a un clásico “carro completo” pues consigue controlar las principales variables políticas y operativas internas y externas de la competencia.
Internas al partido-movimiento pues logra armar coaliciones consistentes locales, regionales y nacionales sinérgicas; asimismo, aminora al máximo los costos de los grupos y líderes no beneficiados con candidaturas; y despliega campañas bien definidas e instrumentadas por tierra, aire y mar; entre otros factores.
Externas porque el gobierno del presidente López Obrador sigue estable, maneja adecuadamente el presupuesto histórico de 9.5 billones de pesos para 2024, sube el precio del petróleo y no hay turbulencias o sorpresas o eventos imprevistos o mal manejados.
Aún así, en este escenario idílico se desata una batalla judicial para determinar si una coalición interpartidaria puede por sí sola obtener la mayoría calificada en las dos cámaras del Congreso, lo que pone a prueba a los organismos electorales.
En ese escenario los partidos de la oposición del Frente por México agudizan su crisis y Movimiento Ciudadano se fortalece como interlocutor del nuevo gobierno.
Un resultado así reforzará la estrategia presidencialista y centralizadora como táctica gubernamental dentro del proceso dinámico y fluido de transformación de las estructuras sociales
El escenario seria propicio y a la vez riesgoso para consumar durante el mes de septiembre de 2024 las reformas electoral o judicial y otras pendientes y ya advertidas por AMLO. Incluso, podría imaginarse un llamado a refundar el orden constitucional.
Escenario 2
Morena gana las elecciones presidenciales pero con menos de 5% de ventaja, y solo con mayorías absolutas o relativas en las cámaras del Congreso.
En ese horizonte, Morena no logra ensamblar la plataforma operativa y hacer las campañas coordinadas referidas en el escenario 1 y la oposiciones se desempeña mejor, aunque diferenciadamente según contextos, configuraciones, fortalezas y debilidades locales y regionales dada la variedad de grupos e intereses.
Además, se dividen triunfos en las 9 gubernaturas, los congresos locales y los 100 municipios más importantes del país.
Se revitaliza la oposición frentista y crece el valor de MC pues su papel de partido bisagra aumenta.
El programa de gobierno solo puede pasar por reformas legales y se concentra más bien en continuar con las políticas, acciones y obras heredadas y con algunos ajustes técnicos.
El poder presidencial luce mas limitado y dependiente de varios equilibrios dentro y fuera del sistema formal.
Escenario 3
La coalición morenista pierde la elección presidencial y gana o pierde por poco el Congreso y la mayoría de las 9 gubernaturas y municipios más importantes.
Las causas serían sus divisiones reales, campaña mediocre, pérdida de confianza y gran operación opositora.
El escenario se torna crítico, la crisis poselectoral es aguda, los organismos electorales crujen y la estabilidad constitucional entra en zona telúrica entre junio y septiembre.
Ante los desafíos del momento y la situación imprevista, Movimiento Ciudadano vuelve a ser bisagra e interlocutor privilegiado para forjar acuerdos y tomar decisiones
Dicha derrota, propinada mediante la estrategia de la “ofensiva de los últimos 2 minutos”, parecida a la de 2006, puede incluir uno o varios eventos catastróficos, tipo Chamartín, España, en 2004; el conflicto magisterial oaxaqueño de 2006; Sicartsa en 2012; Acapulco en los días que corren, o bien, una insurgencia indígena o violencia política tipo 1994, o una explosión criminal o no en alguna de las praderas más propicias: la migratoria o la campesina, cualquiera de tales eventos mal manejado política o mediáticamente.
Morena se repliega y debilita, los partidos frentistas se reponen y MC queda en posición comprometida.
En lugar del modelo presidencial se intenta el gobierno de coalición, sin mucho éxito. El panorama es complejo.
Los escenarios y alertas deben ser atendidos por todo actor inteligente porque la confianza es mal consejera, lo mismo que la duda y la inseguridad.
Maquiavelo advirtió hace medio milenio que el azar y la fortuna acompañan siempre a los juegos de la política. La historia también enseña que el destino puede ser más previsible si se aprende de ella.
