Los candidatos increíbles: hay gente que no debería ni hacer el intento
Ahora que empiezan todas las pre pre pre campañas se ha oído sobre un montón de candidatos que pareciera increíble que se quieran lanzar por algún puesto en la malgastada política nacional.
En esta columna solo le pongo algunos de los que me parece que no deberían ni hacer el intento porque creo que la gente no votaría por ellos. Seguramente me faltaran muchos, pero se lo dejo a usted para que tenga una buena discusión de sobremesa.
Hugo López-Gatell
Me sorprende que al rockstar de la epidemiologia después de todo lo paso con la pandemia del COVID19 se le haya ocurrido pensar en aspirar a la jefatura de gobierno de la CDMX.
Si la elección hubiera sido al principio de la pandemia, seguramente hubiera hecho un buen papel y quizá hasta hubiera ganado. Pasados casi 4 años del inicio de la pandemia, creo que su popularidad ha caído y no es el candidato preferido por muchos mexicanos.
El manejo de la pandemia no fue el mejor y seguramente muchas personas se acuerdan de todo lo que sufrieron por las decisiones y la mala información sobre las muertes que causo el maldito virus. Desconozco su trayectoria como médico, pero su papel como funcionario de salud fue cuestionado por muchos y reconocido por muy pocos.
López-Gatell ya no se encuentra en la cumbre de popularidad y después de lo que paso en pandemia, se me hace un poco increíble que se quiera lanzar como candidato para la jefatura de la CDMX.
Eduardo Verástegui
Hasta hace poco supe que Verástegui fue integrante de un grupo vocal masculino de nombre Kairo. Así como el éxito del grupo y el aporte sobre la cultura musical del país, así veo la participación del cantante, actor y director de cine en la carrera presidencial.
Los candidatos independientes han podido hacer poco y nada en las carreras por la presidencia. Recordemos al Bronco Rodríguez, a Margarita Zavala o el fallido intento de Ferriz de Con al buscar la presidencia de México,
No hace mucho, Verástegui tuvo una conversión al extremo al catolicismo y con esa bandera se convirtió en un conservador extremista que raya en algo que me parece falso y actuado. No puedes predicar una cosa y practicar otra y esto es lo que me parece que hace el actor de origen tamaulipeco.
Verástegui dice “Los invito a renunciar a los siete partidos políticos que son como las siete plagas que están llevando a México a la ruina. Los invito a renunciar a la violencia y la impunidad que están haciendo tanto daño al país”. Claramente, está tomando eso de las 7 plagas como alusión a un pasaje del Apocalipsis.
Lo curioso es que Verástegui pide erradicar la violencia y sale con un rifle disparando. ¿Dónde está la coherencia?
Lo mismo pasa con la obtención de firmas para su registro como candidato ante el INE. 2 mil 967 firmas con inconsistencias tiene Verástegui en su registro. Y todavía le faltan bastantes como para ser considerados como candidato. ¿Estará respetando el mandamiento de no mentiras?
Si López-Gatell me parece increíble, Verástegui juega en otra liga.
Samuel García
En otras circunstancias, no me parecería raro que el Dr. García Sepulveda se lanzara como candidato a la presidencia. El gran problema que no está siendo coherente con lo que ha dicho desde que se lanzó su predecesor al mismo proceso.
Cuando fue diputado local critico fuertemente al Bronco por la decisión de dejar el estado y buscar la presidencia. El Bronco nunca dijo que no buscaría la presidencia y cuando lo hizo, pienso que fue con un deseo sincero y con la ilusión de ganar cegado por un equipo de trabajo que le decía que sí tenía posibilidades.
Samuel lo crítico y con razón. No es lo mismo “chapulínear” de diputado o senador que “chapulinear” siendo el poder ejecutivo del estado. Al parecer el Samuel diputado es de otro universo diferente al de Samuel gobernador. No creo prudente que busque la candidatura a la presidencia cuando el estado está sufriendo varias crisis que no se ve que se vayan a solucionar en los próximos meses.
Multiverso
Parece que todos estos candidatos increíbles viven en un universo paralelo donde son coherentes en el decir y en el hacer.
¿Qué otros candidatos increíbles se le ocurren? Hay todavía muchos más.