La efervescencia que se vive en Chiapas
La precampaña más importante —en términos políticos— es la que acaba de concluir con la ratificación como candidata de Morena a la presidencia de la república de Claudia Sheinbaum. De hecho, hay información reciente de la encuestadora que encabeza Roy Campos, que confirma el paso dominante del lopezobradorismo a unas semanas de que inicie el proceso oficial. En ese sentido, son más de 30 puntos de ventaja sobre la abanderada del Frente Amplio por México. El estudio que se difundió, en efecto, muestra el fracaso de Xóchitl Gálvez, que ha optado por la guerra sucia desde todos los frentes. Inclusive, nos dimos cuenta de esa situación por la intensidad que, de manera sistemática, arreció en las redes sociales.
El problema para Xóchitl es que, ni con esos mecanismos perniciosos ha logrado posicionar su nombre, pues, de manera paradójica, los ataques siguen fortaleciendo la aspiración presidencial de Morena. Por esa razón, desde un principio, Sheinbaum decidió concentrarse únicamente en la tarea de recorrer el país. De hecho, estos dos meses de precampaña fueron fundamentales para afianzarse en el proceso electoral. Es sencillo: el lopezobradorismo triunfará con gran margen de diferencia. Y no solamente la misión será refrendar aquella victoria histórica del 2018, sino ganar todas las posiciones. Las señales son muy claras y la encuesta de SDP Noticias —como una de las metodologías más acertadas del país— ha confirmado que Morena está en condiciones de ganar las nueve gubernaturas.
En vista de ello, hemos llegado a un escenario determinante. Hace unos días se cerró la precampaña presidencial, así como inició, el ejercicio en las entidades federativas que tendrán relevo en el ejecutivo, que al igual que la contienda presidencial, tienen un gran nivel de importancia por lo que se jugará. Morena ganará, de acuerdo con los datos, los nueve estados de la república. Inclusive, lo dijimos, ha cerrado la brecha en Guanajuato. Mientras esa concepción puede ser una realidad, ha comenzado el periodo de precampañas en Chiapas, con su protagonista principal, Eduardo Ramírez, coordinador de los senadores de la fracción mayoritaria.
Según datos, en este momento, dos terceras partes del padrón electoral en Chiapas ha tomado partida por Eduardo Ramírez. Es una oportunidad inmejorable para el líder senatorial, pero, también, es un motor de impulso para la propia Claudia Sheinbaum. La realidad es que, desde su llegada al proceso interno, “El Jaguar”, como le conocen, tomó la batuta y el control político de las estructuras en Chiapas. Rápidamente, a su vez, todos los referentes o liderazgos que tienen afinidad con el lopezobradorismo, le tendieron la mano. Y, una vez formalizado el registro como precandidato único, Ramírez ha ido en ascenso en las encuestas de opinión pública.
Solo para poner un ejemplo, la encuesta de encuestas —que constantemente se publica a través de una ponderación con distintos estudios— ha concluido que, para Chiapas, más del 65% de la población ha tomado partida por Morena y Eduardo Ramírez. Así que, con ello, Morena el sur del país seguirá conservando uno de sus bastiones más significativos en padrón electoral. Con esa premisa, es un hecho, podemos ir proclamando al “Jaguar Negro” como el próximo gobernador constitucional. Siendo el favorito, y ya con la precampaña en marcha, se puede ampliar todavía más el porcentaje de intención de votos a favor de la causa lopezobradorista.
La precampaña ha iniciado en Chiapas, hay asambleas de información, lo mismo que recorridos territoriales por los distritos más importantes de la geografía chiapaneca. Eduardo Ramírez ha comenzado muy bien. Se puede decir que lo ha hecho con el pie derecho. Ha convocado miles de asistentes en cada punto o reunión. Todo esto viene en un momento clave para él, pues el lopezobradorismo acumula una fuerza contundente. Es una auténtica efervescencia la que se vive en el sur del país. Por esa misma razón, la elección en Chiapas apunta para ser una de las más votadas a nivel nacional y Morena vencerá.
A propósito, nos cuenta, el senador Eduardo Ramírez asistirá a la plenaria que organiza la fracción de Morena. Será en Xicoténcatl, como comúnmente se ha llevado a cabo. Se espera que los trabajos y la planeación concluyan con buenos acuerdos. De hecho, ese puede ser, sin temor a equivocarme, el marco perfecto para que Eduardo Ramírez entregue el bastón de mando legislativo. Él, en vista de su nueva encomienda, es muy probable que solicite licencia en los próximos días y, con todas las condiciones dadas, se traslade al sur del país para cumplir con la tarea que le delegó el CEN para ser, en efecto, el abanderado del lopezobradorismo en Chiapas y futuro mandatario constitucional.
