Campesinos denuncian que la Ley de Aguas mantiene el modelo heredado de 1992
Colectivos de campesinos han denunciado que la “nueva” Ley de Aguas Nacionales, ya aprobada por el Congreso de la Unión, mantiene el mismo modelo instaurado en 1992, sin mecanismos que les garanticen el acceso al agua.
De acuerdo con la información, el principal objetivo de la Ley de Aguas es que el agua se convierta en un derecho humano y deje de verse como una mercancía, pero los campesinos argumentan que no hay cambios sustanciales.
Campesinos aseguran que la “nueva” Ley de Aguas no es tan diferente como el modelo heredado de 1992
Campesinos de las organizaciones Agua para Todos y Contraloría Autónoma del Agua denunciaron que la reforma de la Ley de Aguas mantiene el mismo modelo que se heredó de 1992 con Carlos Salinas de Gortari.
Las agrupaciones han expresado que esta Ley de Aguas no contiene mecanismo reales para combatir el acaparamiento y la sobreexplotación, además de que no da certeza del acceso al agua a los campesinos.
Según los campesinos, la iniciativa de la Ley de Aguas habría sido aprobada de forma exprés, dejando de lado la participación ciudadana y la revisión pública, además de que se ignoraron propuestas claves de los agricultores como:
Prohibición de la privatización de obras y sistemas de agua y saneamientoAcceso prioritario al agua a pueblos indígenasIntegración de consejos de cuenca representativosTipificación de la contaminación como delitoEliminar concesiones industriales con adeudos o sin pago de derechosProtección de familias ante la posible extinción de derechos por falta de comprobación de uso
Los campesinos señalaron que la reforma no obliga a la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) a poner orden al sistema de concesiones o a combatir la corrupción con la transparencia de solicitudes ni mucho menos a la implementación de tecnología.