La perspectiva para las fórmulas del Senado

Morena pasó la primera prueba de fuego para salir en unidad, pues Claudia, para el ejercicio que se avecina, cuenta con toda la maquinaria para refrendar el triunfo histórico del 2018. Respecto a ello, todos los aspirantes que se midieron a la evaluación han reconocido la victoria de Sheinbaum. De hecho, la más reciente incorporación de Marcelo Ebrard le ha dado, en efecto, fuerza al movimiento y, con ello, empuje para contribuir a conquistar el mayor número de posiciones al recibir el respaldo de todos.

Como sabemos, vendrán días determinantes para conocer a los próximos abanderados de Morena al Senado de la República. Es muy probable que, el desenlace, se dé a conocer de un momento a otro. Incluso, ha trascendido que, en medio de todo este proceso, hay decisiones que se han tomado. Es decir, los resultados de la encuesta, ya procesados, estarían listos para salir a la luz pública. Parte de esa concepción pudo haber tenido lugar el pasado fin de semana en una reunión que sostuvo Sheinbaum como gobernadores. Nos dimos una idea de eso, pues el tema se convirtió en un asunto de interés cuando circularon fotografías en las propias redes sociales.

Se dice que, en el asunto de las senadurías, hay determinaciones que están tomadas de acuerdo con la propia percepción de las encuestas que levantó el partido. Incluso, voces que estuvieron presentes en la reunión nos cuentan que, entre los puntos medulares, se habló del criterio o evaluación que se puso en marcha. Pero, más allá de eso, hay una intranquilidad para que no se lleven a cabo criterios que no encajen en esa lógica de los estudios a priori.

Por ejemplo, en Michoacán, todas las encuestas de opinión apuntan a Carlos Torres Piña, como el perfil que mayor proporción de apoyo ha captado. De hecho, no vemos, por la magnitud de la distancia, otro escenario más que el triunfo del exsecretario de Gobierno, salvo que ocurra algo extraño en vísperas del destape que sacuda el tablero. Hablamos del enigma de una encuesta. Con relación a ello, en las últimas designaciones para la presidencia y las nueve gubernaturas, hubo una auténtica toma de decisiones de forma democrática. En efecto, el ejercicio, desde muchos ángulos, fue calificado como transparente. O sea, se respetó la voluntad del pueblo y hubo fidelidad a los principios del movimiento.

Es previsible que ese escenario sé dé para las fórmulas del Senado de la República. Eso, además de ser un tema crucial para consolidar la democracia, significa un tópico relevante al dejar de lado cualquier injerencia, pues lo más importante, claro está, es competir con los mejores perfiles del movimiento. Tan solo en Michoacán, ya lo dijimos, la baraja de aspirantes es enorme, sin embargo, la población se ha inclinado por Carlos Torres Piña. Esto implica que, con esas condiciones a su favor, su designación sea un hecho inminente. O sea, no puede existir desapego a los mecanismos o reglas de participación interna. En el caso de Morena, de acuerdo a los estatutos, la encuesta es la vía de elección y, en ese sentido, todas las direcciones apuntan al exsecretario de Gobierno en Michoacán.

En ese sentido, la comisión nacional de encuestas tiene que llevar a cabo su trabajo después de procesar los datos que levantó. Solo eso: respeto a la decisión de las mayorías es lo que siempre clama la población civil. En este momento, sabemos, la dirección que encabeza Mario Delgado, para las senadurías, tiene en sus manos algo que ya está confirmado por todos los michoacanos: Carlos Torres Piña, con gran margen de diferencia, se impuso a todos los participantes. Será, no hay duda de ello, uno de los integrantes que formen parte de la fórmula en Michoacán, para refrendar el triunfo histórico del 2018 en -lo que conocemos de antemano- es un punto coyuntural clave de la lucha democrática del país, sobre todo de la izquierda en México.