Ebrard, Eduardo Ramírez y Chiapas

Un ejercicio electoral requiere de unidad, fuerza, colaboración y mucha estrategia para saber sobrellevar el proceso. Además de ser de gran ayuda, servirán para apuntalar las tareas en aras de construir una candidatura ganadora. Estamos hablando de hilvanar un equilibrio para tomar buenas determinaciones. Todo ello, claro está, tendrá influencia para poder ser definitivos el día de la votación. Hablamos del ejercicio electoral, así como las decisiones que se tomarán para decidir el relevo del presidente López Obrador, lo mismo que nueve entidades federativas y ambas cámaras legislativas.

Si hay algo que está prácticamente definido, es quien ocupará el cargo de nueva presidenta constitucional de México. Me refiero a Claudia Sheinbaum, futura mandataria que, para el caso, avanza en la consolidación del proyecto de transformación que inició López Obrador. La prueba más contundente es la expresión del pueblo y, de paso, de todas las encuestas de opinión, incluyendo la de SDPnoticias. De hecho, la metodología de este medio de comunicación, después de la salida de Samuel García, ha levantado un nuevo sondeo. El hecho es que, con ello, Sheinbaum sigue creciendo y multiplicando su paso.

Supo, entre muchas cosas más, integrar a un equipo de precampaña potencialmente competitivo para ahondar en áreas de oportunidad. Esto ha tenido un efecto positivo que, con el paso de los días, se irá fortaleciendo. Se sabe que, de un momento a otro, Marcelo Ebrard puede aparecer en un evento de Claudia Sheinbaum. Ambos van en la misma dirección para ganar el proceso electoral. De hecho, el excanciller, en varios encuentros privados, concilió y acordó temas para caminar en unidad. Pueden ser, en gran parte, espacios de elección popular. Incluso, con la permanencia de Ebrard la posibilidad de acrecentar la proporción de la votación crece.

Claudia Sheinbaum, en ese sentido, entendió perfectamente el poder político que representa la figura de Marcelo Ebrard. Y, en su afán por sumar a la causa lopezobradorista, Ebrard se ha reunido con precandidatos y, con ello, contribuirá al triunfo. Lo hizo con Clara Brugada en la Ciudad de México. De ese mismo modo, se reunió con Eduardo Ramírez y toda la estructura territorial de Chiapas. Eso tiene que ver, como sabemos, con la plataforma que ha ido construyendo Marcelo a lo largo y ancho del país. O sea, fue un gran acierto mostrar algo que, de manera necesaria, es indispensable retratar. Hablamos de la unidad, máxime si se trata de un proceso electoral de una magnitud sin precedentes como el que vivimos.

Como sabemos, Eduardo Ramírez ganará la elección en Chiapas. De acuerdo con las últimas encuestas de opinión, más del 55% votaría por él. A diferencia de la oposición, “El Jaguar” ha mantenido el paso y, al mismo tiempo, suma cuadros importantes que, a la postre, le traerán buenos dividendos. Eso lo podemos ver con la fotografía en la que posó Marcelo Ebrard y el propio hermano del presidente López Obrador. Con ello, el coordinador de los senadores de Morena, no tengo duda, sacará el máximo provecho para legitimarse en el despacho estatal.

De hecho, Ramírez ha mantenido el buen ritmo y, en este momento, le saca 30 puntos a cualquiera que fuese el abanderado del Frente Amplio por México.

Con esos niveles de respaldo, Morena refrendará el triunfo electoral del 2018 y en esa lógica, Eduardo Ramírez llegará al despacho estatal de Chiapas, y se está preparando para ello. Se sabe que, en unos días más, el coordinador de los senadores solicitará licencia para separarse de su responsabilidad legislativa. Una vez que eso suceda, tendrá en sus manos la encomienda de coordinar los trabajos territoriales y, de paso, tomar decisiones importantes en aras de construir los mejores cuadros que favorezcan al triunfo inexorable.

En vísperas de convertirse en el próximo sucesor de Rutilio Escandón, el coordinador de los senadores de Morena, con ese olfato que se hace presente en los momentos coyunturales claves, ha sabido tejer fino y asumir la responsabilidad de pronunciarse abierto a sumar a todos los que anhelen profundizar la transformación en Chiapas, existiendo disposición para abrir el compás y ofrecer espacios de interlocución para sumar voluntades, especialmente aquellas visiones que encajan perfectamente en el desarrollo social.

A propósito, Eduardo Ramírez solicitará licencia esta misma semana; se estima que sea el próximo viernes 15 y, con ello, alimentará, con el tiempo suficiente, lo que será su programa de gobierno y su equipo de precampaña que lo acompañará al ejercicio territorial que muy pronto comenzará.