Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030: Educación

El pasado 28 de febrero de 2025, la Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados publicó el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2025-2030. El PND es el principal instrumento de organización y proyección de las políticas públicas del gobierno federal, en México. (Ver: Gaceta Parlamentaria, Año XXVIII. Palacio Legislativo de San Lázaro, viernes 28 de febrero, 2025. Número 6731-I).

El PND se establece en la Constitución Política, específicamente en el Artículo 26, apartado A. Este artículo señala que el Estado debe contar con un sistema de planeación democrática del desarrollo nacional.

En la sección de presentación, escrita por la presidenta Claudia Sheinbaum, el PND señala: “Vamos a reafirmar los objetivos de la Nueva Escuela Mexicana, basada en educación pública, con planes y programas de estudio de enfoque humanista. Se han impreso 160 millones de libros de texto gratuitos y se crearon nuevas materias. Adicionalmente, se rehabilitaron 174 mil planteles con la Escuela es Nuestra. Se dialogó con los maestros y se basificó a 960 mil profesores, con un aumento de 48% de sus salarios, quienes tienen hoy un ingreso mínimo de 17 mil pesos mensuales.” (p. 8) “La cultura es la principal herramienta de la transformación, el arte y la creatividad desde la infancia. Un pueblo educado y cultivado es un pueblo libre.” (p. 9)

“Todas las niñas y niños que asisten a escuelas públicas desde preescolar, primaria y secundaria recibirán una beca, comenzando con la secundaria el próximo año.” (p. 15) “Buscaremos la creación del sistema de educación cultural y artística formal y comunitaria, la remuneración justa para artistas mexicanos y su seguridad social y promoveremos círculos de lectura en todos los ámbitos. La construcción de un Sistema Nacional de Cuidados será una de las grandes transformaciones del sexenio, reconociendo y redistribuyendo el trabajo de cuidados entre el Estado, la sociedad y las familias. Se garantizará que ninguna niña, joven o mujer vea limitada su autonomía por la falta de apoyos y políticas públicas que reconozcan sus derechos.” (p. 16)

“El Proyecto de Nación encabezado por la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo se fundamenta en los cien compromisos de gobierno para el periodo 2025-2030, mismos que se agrupan en catorce repúblicas y fundamentan la elaboración de este Plan Nacional de Desarrollo.” De los 100 compromisos para el segundo piso de la transformación, los siguientes corresponden a la “república educadora, humanista y científica”:

26. Continúa la Nueva Escuela Mexicana.

27. Desaparece la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros. Nuevo sistema de contratación y promoción de maestros.

28. La Escuela es Nuestra se ampliará a nivel medio superior.

29. Las primarias extenderán horarios para incluir deportes y artes.

30. Las escuelas serán espacios de prevención de la salud.

31. Se aumentarán los espacios en educación media superior.

32. 300 mil nuevos espacios para educación superior.

33. México será potencia tecnológica y de innovación.

34. Programa de desarrollo tecnológico para el desarrollo nacional.

35. Todos a ponernos la pila con deporte comunitario y apoyo a deportistas de alto rendimiento.

Dentro del apartado “Diagnóstico de la nación: ¿Dónde estamos”, en el eje general 2, titulado “Desarrollo con bienestar y humanismo”, el PND actual define cuatro ideas para la acción gubernamental, es decir, para orientar el rumbo de las políticas públicas educativas del sexenio en curso:

“La educación es un derecho, no un privilegio. Hay 11.3 millones de becas para estudiantes de todos los niveles, la mayor inversión en becas para educación en la historia del país.”… “La educación humanista y científica es un pilar fundamental del proyecto nacional y condición para el progreso del país.”… “En el apoyo a todos los niveles educativos, destaca la inversión en la primera infancia, pues los primeros años de vida son decisivos para el desarrollo integral de las personas. Invertir en la primera infancia asegura una base sólida para la educación futura, la inclusión social y el bienestar económico.”… “Las escuelas serán espacios para el cuidado de la salud.”

Por otra parte, se afirma lo siguiente: “…se promueven acciones para fortalecer el sistema educativo en su conjunto, especialmente en la educación media superior y la expansión de la oferta educativa de nivel superior. De forma simultánea, se ha dignificado la labor de las maestras y los maestros, respetando sus derechos laborales y mejorando sus ingresos a través del diálogo permanente… La Nueva Escuela Mexicana implementa un nuevo modelo educativo para una formación integral de los estudiantes, que atiende su salud física y mental, vinculando el deporte con la formación artística y cultural, bajo un enfoque comunitario. Las primarias extenderán horarios para incluir deportes y artes.” (pp. 41-42)

Elementos del diagnóstico: “Según la Secretaría de Educación Pública (SEP), solo el 28% de las niñas y niños que iniciaron sus estudios en 2007 completaron una licenciatura. Por ello, es esencial que las oportunidades educativas sean una realidad para todas y todos los mexicanos. (p. 45) … La cuarta transformación ha iniciado un proceso para rescatar el Sistema Educativo Nacional, eliminando una visión que perpetuaba desigualdades mediante la formación de estudiantes poco críticos, con bajos niveles de conciencia social y una lógica de competencia en lugar de cooperación. El abandono del sistema educativo era tal que se requirieron esfuerzos de gran magnitud para corregirlo: desde la construcción de escuelas, la contratación de docentes, hasta la provisión de materiales educativos, y garantizar la permanencia y éxito en los estudios.”

Ojo: no hay que confundir: en educación, las competencias tienen un sentido de “ser o lograr que el o la estudiante sea competente”, no en la lógica de “competir”.

Así sigue el PND: “El reconocimiento y capacitación docente son fundamentales para la transformación educativa del país. Es necesario fortalecer un sistema de admisión, reconocimiento y promoción transparente que garantice los derechos laborales de los docentes y considere la diversidad de los contextos en los que se lleva a cabo su labor.” (p. 46)

¿Otro monstruo como la USICAMM, pero con otro nombre?

Tres de los puntos a considerar para un análisis preliminar sobre los contenidos del documento, una vez que se ha hecho público el PND, son: 1) la cuestión de los procedimientos y las maneras en que se habrá de concretar el plan (los “cómos”). Un plan de desarrollo nacional tiene el riesgo o la desventaja de estar escrito en una lógica de enunciados políticos generales (a veces de tono demagógico) y sobre la base de buenas intenciones, o en una narrativa centrada en el “deber ser” del Estado mexicano; 2) la cuestión de los recursos financieros insuficientes y las carencias institucionales que padecemos, como nación y como sociedad, para hacer un uso transparente y con rendición de cuentas de los mismos, para llevar a cabo, mediante programas y acciones específicas, lo que establece el plan nacional; y 3) discutir los términos, contenidos, tiempos y movimientos de los programas y las acciones que conducirán hacia una adecuada concreción del plan.

Dudas: cuando, en la sección de presentación el PND, se afirma: “…se basificó a 960 mil profesores, con un aumento de 48% de sus salarios, quienes tienen hoy un ingreso mínimo de 17 mil pesos mensuales…”, surgen dudas acerca de dicha “basificación” de profesoras y profesores: ¿trabajadores y trabajadoras de qué nivel educativo, básica o media superior o ambas? ¿Dónde se aplicó el mencionado aumento de 48% a los salarios, en educación básica o media superior o ambas?

Dadas estas preguntas, considero que es necesario precisar la información y no perder de vista los datos y los contextos específicos sobre lo que se planea desde el ámbito nacional (nivel macro social), así como en los ámbitos locales, en el inicio y a lo largo del documento.

Otro de los temas pendientes es el problema de la precarización del trabajo docente (inestabilidad laboral y desprotección en los derechos de las y los trabajadores), que no sólo se da en la educación básica, sino también en los niveles de educación media superior y superior, tanto pública como particular. ¿Cuál es la situación actual de los miles de docentes que son contratados por tiempos parciales o específicos y que no cuentan con un paquete de derechos laborales básicos? ¿Cuáles son los planes para cambiar o revertir esa situación, a efecto de alcanzar y garantizar condiciones de trabajo dignas para profesoras y profesores del país?

Coincido plenamente en una afirmación que se registra al final del diagnóstico: “A pesar de los avances significativos en los últimos años, persisten desafíos en cuanto a equidad, eficiencia y cobertura, que requieren políticas educativas integrales.”

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