¿Qué nutrientes aportan los frijoles al cuerpo?

Los frijoles son una excelente fuente de nutrientes esenciales para la salud. A continuación, te decimos algunos de los que aporta esta leguminosa, según la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO). 

Los frijoles son un alimento nutritivo y versátil, presente en la dieta de la población mexicana, por tener una variedad de beneficios para la salud. 

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De acuerdo con un estudio publicado en la revista de la Profeco, en su edición de marzo, se detalló que los frijoles pueden estar presentes como plato principal, guarnición o complemento de un régimen alimenticio.

Algunos de los nutrientes que aporta el consumo de frijoles incluyen:

Carbohidratos
Vitaminas del grupo B, como tiamina, riboflavina, niacina y ácido fólico.
Minerales como hierro, magnesio, potasio, zinc, calcio y fósforo.
Alto contenido de proteínas de bajo contenido graso
Fibra

Lo anterior está presente en las 150 variedades de frijol en el mundo, de las cuales 70 de ellas se encuentran en México.

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Por otro lado, esta leguminosa, que además de ser económica, se puede emplear para preparar diferentes platillos clásicos de la cocina mexicana, como la sopa tarasca, los frijoles charros, los frijoles puercos y los frijoles de la olla, también otorga beneficios como:

Benéficos para la salud

Reducción del riesgo de enfermedades cardíacas
Mejora de la salud digestiva
Reducción del riesgo de diabetes tipo 2
Apoyo a la salud ósea
Mejora de la salud renal
Reducción del riesgo de ciertos tipos de cáncer

En tanto, los frijoles son un alimento importante en la dieta de los mexicanos; tan es así que el consumo anual de esta leguminosa, por persona en nuestro país, es de 7.7 kg.

De tal manera que no olvides seguir las siguientes recomendaciones a la hora de comprar este alimento, para que sea de la mejor calidad, y aspi aproveches todos sus beneficios.

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Recomendaciones de compra y de consumo

Revisa que estén en buen estado: Si lucen arrugados, quebrados o descoloridos, es señal de que son viejos y podrían no cocinarse correctamente. Los frijoles también deben conservar, de manera natural, su brillo, no estar pálidos o amarillentos.
Inspecciona que no tengan agujeros: Si los tienen, es probable que estén infestados de gorgojos, una plaga que puede afectar otros alimentos almacenados.
Revisa que no contengan impurezas: Dichas impurezas pueden ser piedras, madera, entre otras.
Remójalos antes de cocerlos: Es recomendable que sea en agua y la noche anterior. De esta manera reduces el tiempo de preparación y eliminas algunos compuestos que causan malestares.
Congélalos: Si no los consumirás en su totalidad, una vez cocinados los puedes congelar, así te durarán más tiempo.
Prueba preparar diferentes platillos con ellos: Descubre la amplia variedad de platillos que se pueden elaborar con frijoles; te sorprenderás.