Mente, tripas, corazón
IRREVERENTE
Les platico:
Tripas:
En julio de 2008, poco más de 30 millones de votantes mexicanos llevaron al poder a López Obrador hartos de las tropelías de priyistas y panistas.
El 53.19% de quienes sufragaron en las casillas lo hicieron con las tripas.
Algo parecido a eso ocurrió en Argentina con “el loco” de Milei.
¿Cómo le está yendo a México? Así o peor les va a ir a los argentinos por utilizar esa parte del cuerpo como motor de sus decisiones.
Porque si México estaba mal a la entrega del poder de Peña Nieto a López Obrador, la situación de Argentina está peor con el cambio de estafeta de Alberto Fernández a Javier Milei, que tendrá lugar el próximo 10 de diciembre en la Casa Rosada de Buenos Aires.
Corazón:
Los votantes mexicanos que instalaron en Palacio Nacional a Andrés Manuel, también se tocaron el corazón el pasado julio de 2018.
Les enterneció quien es llamado cariñosamente como “cabecita de algodón” y más cuando arrancó su perorata de que “primero los pobres” y toda la propaganda goebbeliana desatada por los pregoneros de la 4T.
Una encuesta informal pero muy bien hecha por cierta alumna del Tec de Monterrey, dejó en evidencia la supina ignorancia de un estudiantado muestra que respondió a la pregunta de por quién votarían en las elecciones presidenciales del año entrante.
Se tocaron el corazón cuando algunos respondieron que por Samuel “porque es joven”, “porque es de Monterrey”, “porque se ve buena gente”, “porque tiene buenas intenciones”, “porque estudió aquí en el Tec”.
“Chavacanos”, miren cómo le está yendo a México con un presidente que llegó al poder porque 30 millones de votantes se tocaron el corazón en la soledad de la urna electoral.
Mente:
El adagio milenario dice que nadie debe tomar decisiones cuando está emocionalmente eufórico (corazón) ni estando encabronado (tripas).
Mi “corresponsal” en Viena hizo una encuesta parecida a la de la chica del Tec.
Ana Garza -mi hija, la doctora- aprovechó el mismo viaje a Berlín donde dio cuenta de la protesta de humanos que se sienten perros y reclaman el derecho a ser tratados como tales, para hacer una singular encuesta informal.
Preguntó a sus mentores alemanes por qué votaron por Angela Merkel para sostenerla como canciller durante 16 años consecutivos, de 2005 a 2021.
Agrupó las respuestas en cinco grandes rubros. Aquí los tienen:
Capacidad y preparación.Orientación al logro.Resultados medidos cuantitativa y cualitativamente.Tino para escoger a sus colaboradores.Adaptación al cambio.
Nada de honestidad, transparencia, amor por el país y sus ciudadanos, familia, moral, transformación, valores, nada de ese tipo de cuestiones subjetivas.
Votaron por Angela con la mente, no con el corazón ni con las tripas.
Incluso hoy, a dos años de su retiro, Angela sigue manteniendo tal nivel de aceptación -aguas, no de popularidad- que si se lanzara al ruedo político de nuevo, arrasaría en las elecciones.
Por eso Alemania es una potencia mundial que después de perder dos guerras mundiales, es hoy un modelo de estabilidad y desarrollo.
Cajón de sastre:
Como decía mi abuela la alcaldesa: ¿Quieren más o les guiso un huevo?
O, ¿acaso será necesario que México pierda al menos una guerra contra otro país, para ver si se repite el fenómeno alemán? Es pregunta, conste, no un augurio.
