El Frente Ñango de Xóchitl llega al Top 10 de los ‘rebrandings’ más tontos de la historia
10º Burberry.
En 2018 eliminó de su marca al famoso caballero que la había identificado durante más de 100 años. Después de un lustro sus gestores entendieron el error y el jinete volvió, es decir, dejó de vagar solito en el mundo deseando la muerte, como en la canción de José Alfredo.
9º Kraft Foods.
Cuando este empresa se partió en dos en 2012 una de las compañías pasó a llamarse Mondelēz International. El público se burló de tan extravagante nombre.
8º Gap.
La famosa empresa de textiles metió la pata en 2010. Cambió su imagen y le fue de la patada. El nuevo logo vivió solo una semana.
7º Animal Planet.
El canal de televisión de Discovery Communications en 2009 modernizó su logo. Le fue muy mal. Sus genios en marketing quitaron al elefante que le caracterizaba, y no gustó. Creo que el paquidermo volvió a su sitio.
6º INE por IFE.
El cambio de nombre no benefició a la autoridad electoral. Antes de la modificación tenía mejor reputación el instituto que administra las elecciones en México.
5º Banamex por Citibanamex.
Nada bueno surgió de tan poco patriota rebranding. El resultado ha sido un banco mucho menos relevante de lo que era. Ojalá su administración se ponga las pilas y trabaje para que la institución recupere su grandeza.
4º Tropicana.
En 2009 los genios que administraban la mercadotecnia de este producto cambiaron su famoso envase que tenía la imagen de una naranja con un popote. Lo sustituyeron por un vaso de jugo. Tropicana solo por eso perdió el 22% de sus ventas.
3º Twitter a X.
Esta puntada de Elon Musk destruyó miles de millones en valor de marca. Al tipo le da igual porque tiene dinero de sobra. Por cierto, don Elon deberá pensar en demandar por daño moral a Samuel García, ya que este se ha presentado como “el de Tesla”. En México eso sí daña a la única marca todavía poderosa que le queda al señor Musk.
2º Coca-Cola a New Coke.
En 1989 esta famosísima empresa estuvo a punto de desaparecer cuando cambió su marca. La equivocación duró solo 79 días y la enorme compañía refresquera se salvó.
1º Frente Guango por Xóchitl.
Solo iba a desaparecer uno de los partidos de oposición en 2024. Ahora morirán los tres del frente opositor que primero se llamó Frente Amplio por México y pocos meses después fue rebautizado como Fuerza y Corazón por México. Pobre Xóchitl Gálvez.
La candidata X no merece que su campaña la dirijan tantos tarados, como Alito, el Impresentable; Marko, el Inútil; Fox, el Papanatas, Zambrano, el Desechado; Claudio X, el Estirado, y Creel, el Inexistente.
La nueva marca será recordada como el harakiri final de la oposición mexicana. Claudia Sheinbaum no tuvo piedad y volvió a rebautizar a esa coalición: ahora como Frente Guango.
Guango, me parece, como sinónimo de Ñango, mexicanismo que significa “oposición totalmente desacertada”, lo que no deja de ser una pena porque el carro completo para Morena que ya se ve cercano gracias a la extrema infructuosidad del Frente Ñango de ninguna manera es positivo en una nación que necesita competencia política fuerte. Pero México necesita tantas cosas y no las tiene. Mala cosa.