Inicia activista huelga de hambre; exige votación de las 40 horas

La activista María Luisa Luévano inició este martes una huelga de hambre a un costado de la entrada principal de la Cámara de Diputados en demanda de que el dictamen que reduce la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales sea llevado al Pleno para su votación.

La huelguista está apoyada por la ex diputada federal Susana Prieto, quien presentó el dictamen en la legislatura pasada.

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La ex legisladora condenó que la bancada de Morena, -a la cual perteneció y renunció por la falta de apoyo a esta reforma-, así como la del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y del Partido del Trabajo (PT) no hayan impulsado la discusión de la reducción de la jornada laboral.

“Este dictamen pareciera que trascendió sin pena ni gloria, pero ya tenemos unas palomitas dadas por la presidenta de la República en su discurso en el Zócalo, atendió esta demanda que recogió de su campaña política y parece que está en su número 60 de sus compromisos.

“Pero estamos muy preocupados, porque, quizá por desconocimiento del presidente de la Jucopo, Ricardo Monreal, dijo que habían tirado todos los dictámenes, luego reculó porque Sheinbaum estaba apoyándolo, entonces dijo que estaba vigente el dictamen”, recordó Prieto.

Después, recordó, el propio líder de Morena en otra entrevista expresó que tal vez daría un regalo de Navidad con la aprobación de las 40 horas, entonces “venimos a ver si nos da un regalito, porque estamos viendo que las reformas constitucionales a veces es cuestión de horas para que sean votadas, éstas es una reforma que está lista para votarse desde el 25 de abril de 2023”.

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Criticó que se hayan presentado otras iniciativas idénticas de Morena, PT y MC, porque eso significaría iniciar desde cero las negociaciones con el sector empresarial para tener un dictamen final y volver a organizar foros de Parlamento Abierto para escuchar a académicos, investigadores y todos los sectores involucrados.

Cuestionada si ella participaría en la huelga de hambre, comentó que estaba imposibilitada por su condición de diabetes e hipertensión.

Sin embargo, llamó a todos los interesados en la aprobación de esta reforma constitucional a acudir a la Cámara de Diputados para apoyar a Luévano, quien aseguró que permanecerá a un costado de la entrada del recinto legislativo hasta recibir el compromiso de una fecha para llevar el dictamen al pleno, o hasta que su físicamente pueda soportarlo.