Descomposición tabasqueña toca a Querétaro

El pasado 8 de marzo en el estacionamiento del bar Fisher’sHouse, al lado del popular restaurante Los Laureles, en Querétaro, acribillaron a tres personas, uno de ellos Diego Méndez, ‘El Changuito’, hijo del ex líder de La Familia Michoacana, Jesús ‘El Chango’ Méndez, parte del grupo de 29 delincuentes entregados a Estados Unidos el jueves 27 de febrero.

En el Lamborghini con placas del estado de Chiapas cuyo valor supera los seis millones de pesos, se encontraron los cuerpos de otro hombre y dos mujeres, una de ellas Berenice Méndez, alias “La Bere”.

Como ya había comentado en este espacio, Querétaro, uno de los pocos estados que se habían mantenido más o menos tranquilos, ya se encuentra en la disputa de los cárteles y en un comunicado el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) se atribuyó el atentado.

El plano de la desgracia

Esto pone a Querétaro en el plano de la disputa entre los cárteles, algunos analistas y versiones policiacas consideran que el objetivo principal del atentado se manejó con un gran sigilo, la cuarta víctima, Justo Rivera Parrazales, era un personaje muy cercano a Amílcar Olán Aparicio, líder de “El Clan”, la red de tráfico de influencias de los hijos del expresidente López Obrador.

Cuando José Manuel Cruz Castellanos era el titular de la Secretaría de Salud de Chiapas, Justo Rivera habría sido señalado por desviar millones de pesos. El actual senador y presunto prestanombres del ex gobernador Rutilio Escandón, cuñado del senador Adán Augusto López Hernández, desviaba recursos millonarios para el Grupo Tabasco.

Amílcar Olán saltó a la fama por su amistad y complicidad con los hijos del expresidente y por los contratos que recibió para la construcción del Tren Maya y la proveeduría del balastro, además de contratos en el sector salud en Tabasco, Chipas y otras entidades, resulta ser que su socio Justo Rivera fue abatido en Querétaro cuando estaba en compañía, nada menos que de los líderes de la Familia Michoacana en plena disputa por la plaza con el CJNG.

Almicar

Latinus publico una investigación profunda sobre las actividades de Amílcar Olán. Con documentos, fotos y audios, revelaron la profunda corrupción y vinculación con los hijos de AMLO. En los audios Amílcar Olán detalla cómo se involucró en el negocio del balastro, mencionando utilidades por un monto de 250 millones de pesos en solo seis meses. Las conversaciones revelan también una presunta coordinación directa con la presidencia para la asignación de contratos.

Amílcar no solo ha estado metido en el tema del Tren Maya, también en temas de medicamentos del IMSS Bienestar. El 6 de diciembre de 2023, MCCI reveló que entre 2020 y 2022, más de 490 millones de pesos de recursos federales provenientes del extinto INSABI terminaron, gracias a la intermediación de los gobiernos morenistas de Quintana Roo y Tabasco, en las cuentas de Romedic S.A. de C.V., una empresa de reciente creación que se encuentra en la lista de distribuidores de medicamentos que no cumplen con la regulación sanitaria y que es propiedad de Amílcar Olán y su socio Justo Rivera.

La investigación de MCCI detalló que el gobierno de Quintana Roo, encabezado por Mara Lezama y el gobierno de Tabasco, durante la gestión de Adán Augusto, otorgaron contratos millonarios para la compra de medicamentos y equipo de curación a Romedic.

Al día siguiente de que se dio a conocer la investigación, AMLO negó que su hijo Andrés tuvieran que ver con ese asunto: “¿Qué tiene que ver mi hijo? A ver, díganme ustedes. O sea, si demostraran que él es socio de la empresa, que hay un escrito en donde él le pide al gobierno de Quintana Roo que le den el contrato, él recomienda o así como escucha Claudio X. González y sus secuaces por teléfono, porque hacen espionaje, que den a conocer la grabación en donde Andrés le pide el favor a un funcionario para que le entreguen el contrato. Nada. Es nada más porque, supuestamente, es amigo del que recibe el contrato”.

Y cínicamente remató: “Ni amiguismo ni influyentísimo ni nepotismo ni corrupción, ninguna de esas lacras de la política. Por eso somos distintos y por eso no han podido ni podrán”. Hoy Andrés además de coyote, es el mandamás en Morena.

Es evidente que los hechos suscitados en Querétaro no serán investigados por la FGR de Alejandro Gertz Manero. Quedo claro desde un principio, que se quiso ocultar que uno de los asesinados era el socio de Amílcar, el gran amigo de los hijos de AMLO.

El Grupo Tabasco cuya cara más visible es actualmente es el senador Adán Augusto López y Andrés López Beltrán se mueve con total impunidad y desfachatez, pero estos hechos hacen ver que ya se encuentran en el ojo del huracán en medio de la disputa entre las organizaciones criminales que ellos mismos empoderaron.

X: @diaz_manuel

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