Homenajea INBAL, con ceremonia, el legado de Tolita Figueroa
La diseñadora de vestuario y escenografía, Tolita Figueroa, quien falleciera el 27 de enero pasado, fue homenajeada ayer en el Jardín Escénico del Centro Cultural del Bosque, en una ceremonia encabezada por la directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), Alejandra de la Paz Nájera.
La titular del INBAL calificó de “impecable” la trayectoria de la diseñadora mexicana, pues: “implantó una imborrable huella en el cine, el teatro, la danza, la ópera y otras producciones artísticas en las que creó una especial narrativa y dimensión estética.
Palabras sobre Tolita Figueroa
María Figueroa, hermana de Tolita, secundó lo dicho por de la Paz Nájera, apuntando que la diseñadora, quien trabajó en cintas como Santa sangre de Alejandro Jodorowsky y Cronos de Guillermo del Toro:
“contribuyó de manera significativa en la historia de las artes escénicas de México, al transformar el campo del diseño teatral y destacarlo como una parte esencial de cada proyecto en el que participó, siendo ejemplo de varias generaciones de artistas de la escena”.
Entre las intervenciones más sentidas, se encontró también la que a distancia mandó la investigadora Mahatma Ordaz, quien aseguró que:
“Si fuera posible definir el trabajo de Tolita en una sola línea, sería plausible afirmar que sus vestuarios son obras plásticas en movimiento, pues gozan de las características compositivas de la pintura (…) Cada proyecto de vestuario suma elementos compositivos a la narrativa audiovisual de la puesta en escena, produciendo así una experiencia estética para el espectador”.
Además de la titular de la institución, en el homenaje también estuvieron presentes Luis Mario Moncada, coordinador nacional de Teatro del INBAL; Martín Acosta, director de Teatro; Jerildy Bosh, diseñadora de vestuario, así como las investigadoras del CITRU del INBAL, la mencionada Mahatma Ordaz y Angélica García.
Finalmente, la titular del INBAL recordó que el año pasado, a cuatro meses antes de su muerte, a través de esta institución reconocieron la trayectoria de las hermanas Figueroa con la Medalla de Oro de Bellas Artes, la máxima condecoración que otorga la institución a sus creadores más destacados.
