La coyuntura para México en 2025

Se inicia el año con desafíos complejos y multidimensionales, enmarcados por una desaceleración económica global, las posibles políticas hostiles de una eventual administración de Donald Trump en Estados Unidos, y la implementación de la cuestionada reforma judicial a nivel nacional. Este escenario presenta una tormenta perfecta que demanda respuestas estratégicas, visión política y coordinación efectiva.

La sombra de Trump y el desafío migratorio y comercial. Trump retoma la presidencia en este mes de enero de 2025, es probable que reinstaure políticas duras hacia México. Las amenazas de deportaciones masivas y nuevos aranceles sobre productos mexicanos evocan los momentos más tensos de su primera administración. Esto tendría un impacto directo en millones de mexicanos en Estados Unidos, quienes podrían enfrentarse a un retorno forzado en un momento de limitada capacidad económica en México para absorberlos. Al mismo tiempo, los aranceles podrían socavar aún más la competitividad de las exportaciones mexicanas, especialmente en un contexto donde el crecimiento económico ya se encuentra debilitado.

Frente a esto, México necesita fortalecer su diversificación comercial, buscando oportunidades en Asia, Europa y América Latina para reducir la dependencia de su vecino del norte. Además, será crucial reforzar las políticas de inclusión laboral y social para los posibles migrantes retornados, evitando que se conviertan en un factor adicional de presión social.

Reforma judicial: entre la promesa y la desconfianza. En el ámbito interno, la implementación de la reforma judicial ha generado controversia debido a su percepción como un intento de consolidar el poder en el ejecutivo y debilitar la independencia del poder judicial. Aunque sus proponentes argumentan que busca combatir la corrupción y hacer más eficiente el sistema judicial, sus críticos temen que sea un instrumento para controlar a jueces y magistrados, socavando los contrapesos democráticos.

En un contexto de incertidumbre económica y social, el debilitamiento de las instituciones puede erosionar la confianza ciudadana en el Estado. México necesita urgentemente un sistema judicial que garantice el acceso a la justicia, proteja los derechos humanos y fomente la inversión, no uno que se perciba como subordinado a intereses políticos. La narrativa oficial es de logros y avances sin comparación. La realidad nacional muestra los datos duros en materia de seguridad y crecimiento económico que no son satisfactorios.

Un futuro incierto, pero con oportunidades. A pesar de estos desafíos, México tiene oportunidades que no debe desaprovechar. El nearshoring continúa siendo un motor potencial de inversión extranjera directa, especialmente en sectores estratégicos como la manufactura, energía y la tecnología. Aprovechar esta tendencia requiere estabilidad institucional y políticas públicas que generen certidumbre.

Asimismo, fortalecer la educación y la capacitación de la fuerza laboral puede ser clave para convertir la adversidad en una ventaja competitiva, preparando a los trabajadores para un entorno global cada vez más competitivo. Este tema en al ámbito regional es clave pues es irregular nivel nacional. Destacan los estados del norte y la zona metropolitana de la CDMX. Pero el sureste y regiones del centro y bajío muestran rezagos importantes, que en el caso del sureste es más grave por el bajo desarrollo regional. Al final los costos para el país por temas de inseguridad, informalidad laboral, contrabando, baja inversión y desarrollo regional. Están estrechamente ligados a la educación de calidad que nos haga competitivos.

En última instancia, la clave para México en 2025 será la capacidad de construir consensos, fortalecer sus instituciones y tomar decisiones estratégicas que privilegien el bienestar de su población en medio de un panorama incierto. Si bien los riesgos son altos, también lo son las posibilidades de forjar un rumbo que combine resiliencia con innovación. La pregunta es si el país y su administración lograrán estar a la altura del desafío.

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