No está en chino
¿De verdad China representa un riesgo para las relaciones comerciales de México? ¿Es necesario ser políticamente correctos e ignorar las críticas respecto a su presencia comercial legítima, así como la acusada como delincuencial?
Presenciamos el replanteamiento de la globalización por una integración de bloques con intereses geoestratégicos ante el arribo al poder de Donald Trump, sea por localización o por tipo de producción. El nearshoring favorece la intervención en fronteras compartidas con el riesgo evidente de convertirse en el puente para el paso de productos procedentes de otras naciones. El friendshoring parece asegurar el respaldo político de los Estados Unidos.
La legítima, aunque estridente crítica a la presencia de inversión China en México en el preámbulo de las renegociaciones del T-MEC, debe ser analizada con la frialdad de los números y no al calor de la oferta electoral al estilo Trump. Al mismo tiempo, es imposible negar el vínculo de un segmento delincuencial de origen chino con prácticas en las cuales ya participan personas de otras nacionalidades: montadeudas, ocupación ilegal del suelo, evasión de impuestos, trata de personas.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, hace pública su preocupación por las inversiones chinas en México aunque confía en mantener el Tratado, mientras la presidenta Claudia Sheinbaum recuerda el escenario persistente en 2018, cuando México abogó por la integración canadiense.
Entre 2016 y 2023, América del Norte captó 395 mil 390 millones de dólares en Inversión Extranjera Directa proveniente de China; a Estados Unidos le correspondió el 68.1 por ciento, a Canadá el 31.5 y a México solamente el 0.4. ¿Quién tiene más presencia china?
Es cierto que la relocalización encuentra en México condiciones favorables por su posición estratégica con relación a EU, como también lo es que la principal venta a ese país son las partes y accesorios de vehículos automotores no necesariamente procedentes de China.
El diálogo durante la Cumbre del G20 en Río de Janeiro entre Sheinbaum y Trudeau es evidencia de la importancia sobre la continuidad y ajuste del T-MEC, y oportunidad para aprovechar el valor de la cercanía con Estados Unidos y Canadá, aún con los acercamientos promovidos por el embajador chino Zhang Jun.
En la renegociación, lo importante será hacer equipo frente a las amenazas de Trump. Lo dijo el embajador canadiense en México, Graeme C. Clark: “Que no haya dos negociaciones bilaterales, sino una verdadera negociación trilateral”. Y China no se quedará “milando”.
La disposición a fortalecer la relación comercial con los vecinos de América del Norte es también voluntad por la multilateralidad. Contra prácticas delincuenciales de origen asiático, como trasiego de precursores químicos, operación con recursos de procedencia ilícita y concentración de productos detectados en bodegas ilegales de la Ciudad de México gobernada por Clara Brugada, debe haber un compromiso también chino.
@guerrerochipres