Karime Pindter se cayó de un tercer piso en plena borrachera; ella llama ‘milagro’ que siga viva
A Karime Pindter -de 31 años de edad- no le avergüenza su pasado; por el contrario, le gusta contar sus más locas y extrañas anécdotas.
En esta ocasión, Karime Pindter dejó boquiabierto a Yordi Rosado al revelarle que cayó de un tercer piso en plena borrachera, caída de la que milagrosamente salió ilesa.
El accidente ocurrió cuando la influencer tenía entre 16 y 17 años, según reveló la propia en entrevista con Yordi Rosado.
Karime Pindter se cayó de un tercer piso en plena borrachera; ella llama ‘milagro’ que siga viva
A Karime Pindter siempre le ha gustado ir de fiesta, por lo que pocas veces rechaza una invitación aún cuando en su adolescencia estuvo a punto de morir por sus excesos.
De acuerdo con lo relatado por Karime Pindter, a sus 16 o 17 años asistió a casa de una de sus amigas para una pijamada, la cual realizarían en honor a su cumpleaños.
Sin embargo, esto se quedó en una simple idea, ya que ella y sus amigas decidieron ir a un antro al cual entraron sin identificación oficial.
Ya que por alguna extraña razón la influencer tenía “vara alta” con los gerentes.
Como era de esperarse, el grupo de chicas consumió bebidas alcohólicas, la influencer no fue la excepción y acabó borracha.
Uno de sus amigos quiso ayudarla a recuperar sus cinco sentidos, pero empeoró las cosas al sentarla en un barandal donde ella perdió el equilibrio y terminó en el suelo.
Karime Pindter cayó del tercer piso de un antro llamado Dubai, que se encontraba ubicado en Mundo E.
“Pinche Luigi, yo estaba hasta el culo y él me dice: ‘Ya estás incontrolable, siéntate aquí’. Me sienta en un barandal y voy para abajo, del privado del tercer piso al suelo”
Karime Pindter
Al respecto, lo gerentes pararon la música y enviaron a la influencer al hospital, donde sus papás la recogieron en traumatología afortunadamente sin ninguna lesión.
Karime Pindter asegura que no es una alcohólica
Aunque Karime Pindter no recuerda qué pasó esa noche, nunca consideró que tuviera problemas con las bebidas alcohólicas, pues asegura le gusta la fiesta, pero sabe cuándo controlarse.
Así como Karime Pindter dice no ser adicta al alcohol ni a las sustancias ilícitas, pues su único vicio fueron las paredes.
Ya que solía rasparlas y comerlas sin imaginar que se le antojaban porque le faltaba hierro.
