Harris rompe récord de recaudación en un mes electoral crucial
La campaña de la candidata presidencial demócrata, Kamala Harris, informó que recaudó 540 millones de dólares en poco más de un mes de cara a las elecciones de noviembre próximo y lo resaltó como “un récord” en la historia de Estados Unidos.
Justo antes de que la vicepresidente subiera al escenario de la Convención Nacional Demócrata para aceptar la nominación de su partido, “cruzamos oficialmente la marca de los 500 millones de dólares”, confirmó la jefa del comité de campaña, Jen O’Malley Dillon, en un comunicado.
“En poco más de un mes desde que lanzamos nuestra campaña, el equipo Harris-Walz recaudó 540 millones de dólares, un récord para cualquier campaña de la historia”, subrayó.
Ese monto se recaudó desde que la vicepresidenta lanzó su campaña, después de que el mandatario Joe Biden abandonara la carrera por la Casa Blanca el 21 de julio y le diera su explícito respaldo. El anuncio demócrata surge en el tramo final de la carrera electoral hacia el 5 de noviembre cuando deberá enfrentar a su rival republicano, Donald Trump.
“Inmediatamente después de su discurso en la Convención, registramos nuestra mejor hora de recaudación de fondos desde el día del lanzamiento”, resaltó O’Malley Dillo, quien detalló que un tercio de las donaciones provenían de simpatizantes que contribuían por primera vez, lo cual se traduce en 180 millones de dólares.
La campaña de la demócrata parece haber animado tanto a los grandes como a los pequeños donantes, lo que supone un cambio de rumbo respecto al período de incertidumbre que siguió a la desastrosa actuación de Biden en el debate de junio.
“Mientras tanto, la infraestructura de Donald Trump en el campo de batalla sigue siendo increíblemente escasa”, lanzó la responsable demócrata.
El expresidente republicano, cuya campaña se vio afectada cuando Biden dio un paso al costado, declaró haber recaudado 327 millones de dólares en efectivo a principios de agosto.
Harris, de 59 años, y Trump, de 78, están empatados en las encuestas a menos de tres semanas de su primer debate televisivo, previsto para el 10 de septiembre en Filadelfia.