Les platico que fue una trepidante carrera llena de estrategias fallidas y una que otra exitosa.

Primero, aclaración pertinente:

Soy piloto, pero no de carreras, sino de otra actividad: el periodismo, que al menos en México, hoy es cualquier cosa menos peligrosa que la de conducir en Fórmula 1.

Consecuentemente, soy diletante en la materia, pero apasionado de la misma.

Me es altamente gratificante no escribir de política y cosas peores, por segundo día consecutivo.

Dicho lo anterior, paso al tema que hoy me ocupa. ¿Arre? ¡Arre!

Primero daré voz a “María Sánchez”, mexicana con más de 40 años viviendo en Berna, Suiza, y 73 de edad. Ella sí le sabe a la F1 y por 3ra vez me acompaña en estas narraciones.

Y hablando de la estrella del día, poca gente sabe que Lewis Hamilton es aficionado a la lucha libre y cada vez que corre el Gran Premio de México va a la Arena México.

Ron Ziv, militar de las fuerzas armadas de Israel en retiro y colaborador de Detona, es quien se encarga de su seguridad durante la estancia del inglés en suelo mexicano.

Aquí les comparto estas fotografías inéditas y por lo tanto, exclusivas, de una de las veces que Lewis asistió al deporte del costalazo.

Ahora sí, cedo la voz a mi amiga mexicana-suiza con su crónica del GP F1 de Silverstone, en las Midlands del Reino Unido:

“La carrera fue para Lewis Hamilton de la escudería Mercedes.

No resultó como se esperaba. Los 4 primeros lugares de la calificación fueron para 3 ingleses y un australiano.

Fue una calificación donde Verstappen y Checo Pérez aterrizaron en la terracería de la pista aunque Max tuvo más suerte y pudo salir para terminar en el lugar 4.

Checo tuvo que abandonar la calificación y empezar la carrera desde los boxes en el lugar 20 y naturalmente no pudo hacer mucho.

En la carrera de este domingo terminó en el lugar 16. En las últimas vueltas, Verstappen le arrebató el lugar 2 a Norris, que quedó frustrado por este resultado.

Principalmente el americano Zack Brown, jefe de McLaren, que ya estaba molesto por la carrera anterior en Austria.

Checo sigue contra la pared y va a recibir mucha presión por parte de su equipo Red Bull.

Comentaristas de la F1 afirman que está en juego su estancia en la firma y su carrera porque el hecho de que haya firmado contrato no le asegura el puesto, si no da resultados.

Red Bull tuvo en esta carrera a un solo hombre: Max Verstappen, quien logró el segundo lugar sin la ayuda de su coequipero. Malo el cuento para Checo”.

Hasta aquí María.

Ahora, me toca:

Uno de los momentos clave de la carrera fue cuando en unos de los muchos cambios de clima -de seco a lluvia y viceversa- Lando Norris recibió la orden de entrar a boxes para cambiar de neumáticos y se pasó, algo pocas veces visto en estas competencias.

Este hecho hizo perder al piloto de McLaren un tiempo precioso que le abrió el camino a Lewis para apoderarse del liderato de la carrera, posición que ya no soltó.

Para entonces, en la vuelta 34 de un total de 52, se dio el abandono de George Russell (Mercedes), quien había salido en la pole position.

Se debió a algo muy parecido a lo que le ocurrió a Samuel García en Nuevo León con la tormenta “Alberto”, dicha la anterior analogía con la venia del piloto inglés:

Estando la pista llena de agua en muchas partes, al auto de Russell le falló el sistema de enfriamiento de sus neumáticos.

En esa vuelta, Lewis marcó récord con 1:30:0 pero poco le duró el gusto pues de inmediato Max tronó ese número.

Entonces, de su equipo le dijeron por la radio que el holandés tenía el mismo tipo de neumático, a lo que Lewis respondió en su clásico estilo: “Lo sé, déjamelo a mí”, y así sucedió.

De ahí en adelante mejoraron las condiciones de la pista y Oscar Piastri (McLaren) marcaría un nuevo récord de vuelta. Velocidad pura en Silverstone: 1.29:09, rompiendo la barrera del minuto con 30 segundos.

A esas alturas de la carrera fue notorio el excelente rendimiento que Max le sacó a sus neumáticos.

Esto sucedía mientras los dos primeros -Lewis y Lando- tuvieron que gestionar el desempeño de sus llantas.

La estrategia de Red Bull para Max fue usar los duros para permanecer el máximo tiempo posible en la pista.

El plan de su equipo fue hacer que el auto del holandés tuviera suficiente hule para aguantar hasta la bandera de cuadros.

Y a Checo le llueve sobre mojado:

Su equipo cometió el error de ponerle llantas intermedias en la vuelta 26, previendo que la lluvia se desataría. Se anticiparon demasiado.

Sí llovió, pero no lo suficiente y eso provocó que el mexicano perdiera hasta 10 segundos en cada vuelta contra sus rivales.

Con llantas para mojado, tenía que andar buscando charcos para enfriarlas, cosa que lo hizo perder posiciones que ya no pudo recuperar.

El traía llantas intermedias -de calentamiento alto- y el resto de los competidores, medias.

Mercedes alardea su capacidad logística:

En uno de los cambios de llantas, los dos pilotos de Mercedes (Russell y Lewis) entraron al mismo tiempo a boxes, siendo que la estrategia habitual es primero uno y vueltas después el otro.

Al hacer esta operación al mismo tiempo, la sincronización fue tan perfecta, que apenas terminaban de cambiarle los neumáticos al auto de Russell en 2:30 segundos, ‘detrásito’ entró Lewis, y otro equipo que ya estaba listo (cada uno con 11 mecánicos) lo hicieron en 2:32. ¡Insólito!

Quizá esa fue una forma de demostrarle a Lewis lo que se va a perder el próximo año, que sale de Mercedes para correr con la escudería Ferrari.

Por cierto, de los abrazos más entrañables que dio y recibió el piloto inglés, fue con su ingeniero de cabecera, Peter Bonnington, ingeniero de carrera personal de Lewis.

Se habla de que al irse a Ferrari tratará de que la escudería italiana también contrate a Bono -como se le conoce- pero conociendo también a Toto Wolff -presidente de Mercedes- va a estar muy difícil que esto ocurra.

Lewis ganó por una mezcla de paciencia e inteligencia. Punto.

Checo perdió precisamente por la ausencia de esas características… Y los errores cometidos por su escudería.

Con decirles que Checo nunca pudo rebasar al Haas de Nico Hulkenberg.

El auto del alemán, equipado con ingeniería Ferrari, desarrolla una gran velocidad (332 Kms/H) al final de los tramos de DRS, pero nunca había logrado vencer a un Red Bull, hasta ahora… A lo mejor fue el piloto.

Cajón de sastre:

Mañana, cambio completo de programa, sin faltar el Incomparable Iván y toda su compañía.