Claudia Sheinbaum, de cara al ejercicio que encabezará, seguramente sigue evaluando algunas posibilidades para sumar cuadros competitivos al gabinete legal y ampliado. De hecho, son muy pocos perfiles los que ha nombrado para ocupar posiciones claves. Eso significa que, en los próximos días o semanas, se incorporarán más actores que trabajaron a la par del proceso de campaña y otros que, por su capacidad en áreas específicas, los tiene contemplados la presidenta electa. Inclusive, se pensó que habría más nombramientos; sin embargo, hay un periodo de evaluación. Siendo así, Claudia estaría considerando la posibilidad de incorporar a Noroña.

Mucho de eso dependerá, claro está, de los propósitos que tenga Claudia Sheinbaum para los próximos meses en que arrancará su administración. De hecho, con la designación de Marcelo Ebrard mandó un claro mensaje para fortalecer la economía en nuestro país, lo mismo que la relación bilateral que quedará en manos de Juan Ramón de la Fuente. Es verdad, abundan muchos perfiles que pueden llegar a secretarías claves como gobernación, SEP y bienestar. Sobre esa premisa, suena mucho el perfil de Gerardo Fernández Noroña para la Secretaría del Trabajo. Desde mi punto de vista, Sheinbaum moverá algunas piezas del ajedrez para aminorar la tensión que se está provocando por las designaciones.

Aquellos que acudieron al cónclave con el presidente López Obrador saben perfectamente el desenlace que el proceso interno traería. De hecho, la misma Sheinbaum comentó que, durante el ejercicio de los aspirantes, solo fueron cuatro abanderados de Morena, uno del PT y uno del verde ecologista. Claudia, en ese sentido, ganó la encuesta y, por tanto, se convirtió en la coordinadora de la defensa del voto o, mejor dicho, en candidata presidencial. De igual manera, Marcelo Ebrard tenía amarrada la coordinación de los senadores de Morena por la segunda posición. Ahí, está claro, prefirió encabezar una secretaría clave que le permitirá estar en los reflectores para una aspiración a posteriori o, en una de esas, cerró un acuerdo y optó por mantener presencia y fuerza en el Senado con personajes muy cercanos a él. En todo caso, eso le dio el pase automático a Adán Augusto para liderar a los legisladores en la cámara alta.

Eso explica, de igual forma, la designación de Ricardo Monreal como futuro coordinador de los diputados en San Lázaro. Hablamos de las cuatro posiciones de Morena en la elección interna. De hecho, así lo han asimilado la mayoría de diputados electos que, en días pasados, se han ido reuniendo con Monreal en distintos puntos del país. Además de ello, claro está, el nombramiento inminente del zacatecano obedece a los grandes resultados que ha entregado como líder en el Senado de la República, inclusive en condiciones muy adversas y ante escenarios de mucha presión, lo que equivale a tener el perfil ideal para encabezar las tareas que se avecinan, especialmente en iniciativas de mucha importancia como la reforma al poder judicial.

Esa habilidad para resolver situaciones de Ricardo Monreal, lo colocan como el mejor operador político que hay en México. Hace un par de días, de hecho, justificamos la buena mancuerna que construirán Monreal y Adán Augusto para fortalecer las tareas y colaboración con el gobierno federal. Y como en política forma es fondo, Ricardo Monreal y López Hernández son los personajes más visibles en la casa de transición de Claudia Sheinbaum para operar -tras bambalinas- las iniciativas que, como prioridades, ha puesto sobre la mesa la presidenta electa. Visto desde ese ángulo, estamos en presencia de los próximos coordinadores de la fracción mayoritaria.

Desde esa perspectiva, Gerardo Fernández Noroña está jugando sus cartas. Se vale, pero sin tratar de dividir. La política es el arte de lo posible. En ese sentido, su posicionamiento tomó mucha fuerza no solamente entre los propios comunicadores, sino entre la opinión pública. De hecho, la oposición ha salido a tratar de aprovechar la coyuntura. La mala noticia para ellos es que, como suele suceder, se quedará con las ganas de ver dividido al movimiento. La propia Claudia Sheinbaum, ante los medios de comunicación, ha dicho el papel preponderante que tiene Noroña. Ante esas circunstancias, la misma presidenta electa le mandó un claro mensaje de que habrá pláticas y negociación para llegar unidos al arranque de la administración. Nada que no se pueda solucionar mediante el diálogo.

Es posible, ya lo dijimos, que Gerardo Fernández Noroña encabece una dependencia federal. Desde esa perspectiva, puede llegar a la Secretaría del Trabajo, donde suena con mucha fuerza. De hecho, tratándose de un perfil clave en el engranaje de la defensa del proyecto de la 4T, Sheinbaum puede acelerar un encuentro con Noroña para limar cualquier aspereza -que no la hay- desde luego.

Notas finales

Quien sigue tejiendo fino es el gobernador electo de Chiapas, Eduardo Ramírez. Apenas ganó la elección, lo hemos visto en Ciudad de México reuniéndose con muchos funcionarios públicos. Eso, desde luego, habla de que hay oficio y experiencia para ir generando puentes de interlocución. Ayer, por ejemplo, platicó con el embajador de China en México. Recordemos que, durante la campaña, una de las promesas fue abrir las puertas al desarrollo social a través de la inversión. Por lo tanto, es una garantía de que habrá muchas áreas de oportunidad en el sur, pues Ramírez, con el inmenso apoyo con el que llegará, tiene las condiciones dadas para hacer historia.