El pato Pekinés y esa Fiscalía podrida
“Este está bueno pa’ bailar…
No sé dónde acomodarte
No sé de qué color pintarte
No sé muy bien qué nombre darte
Si te veo por la calle
Pero sé que tú me miras a los ojos y es algo único
Sé que yo
Siempre quiero más.”
JULIETA VENEGAS
“Los celos que opacaron tu ilusión
No dejan ver lo esencial entre los dos
Estoy aquí
Y te juro se acabó
Entonces, olvídalo,
perdóname y pasó.”
MIRANDA / CRISTIAN CASTRO
La FGR lo volvió a hacer: culpa al Poder Judicial de sus fallas, barre la corrupción debajo de su propia escalera y de paso permite a Emilio Lozoya enfrentar su proceso desde la comodidad del hogar. Sí, esta Fiscalía ha hecho hasta lo imposible para dejar impune la corrupción del gobierno de Peña Nieto.
Pero a lo anterior debemos sumarle que, si bien de antemano se sabe que la responsabilidad de la “pifia”recae en Alejandro Gertz Manero y su fiscalía, en esta, como en otras ocasiones, a López Obrador le queda como ‘anillo al dedo’ para tener un nuevo distractor y también una nueva excusa para atacar a la rama judicial del Estado. Le será muy fácil al inquilino de Palacio señalar a jueces y hasta a la mismísima SCJN; no tarda en presentarnos ese show hoy en la mañanera.
Emilio Lozoya llevará su proceso en prisión domiciliaria —esto es, como era antes—. Tendrá que usar grillete electrónico, no podrá abandonar el país, pero podrá enfrentar las acusaciones que se le imputan desde la comodidad de su casa o, bien… del restaurante Hunan (no se olvide, la única razón por la cual Lozoya pisó la cárcel fue por la indignación suscitada por las fotos que tomó la periodista Lourdes Mendoza del procesado comiendo plácidamente en esa localidad; ante el escándalo, Gertz Manero no le quedó más remedio que hacer lo que no quería: solicitar el cambio de medida precautoria para el imputado).
Detrás de todo esto existe un grandísimo conflicto de interés: la relación de familia y la gran estima que el fiscal guarda a Lozoya y a su padre. ¿Habrá llegado esta a tal grado que la FGR adrede realizó la investigación previa de manera incorrecta? Es pregunta.
Este nuevo cambio de condición —seguir el proceso desde su domicilio— no es sinónimo de ser exonerado. Pero, si bien es cierto que la prisión domiciliaria es un beneficio que muchos acusados pueden obtener, es un hecho que el justificar y cumplimentar la prisión preventiva no era responsabilidad del juez sino del Ministerio Público adscrito a la Fiscalía General de la República.
No obstante lo anterior, el presidente AMLO distorsionará la realidad diciendo que Lozoya obtuvo la libertad provisional debido a un juez corrompido; en sus dichos lo acompañarán propagandistas del régimen. Del verdadero responsable del desaseo en el caso Lozoya no dirá nada.
Tampoco dirá que fue Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad la que, en 2017, primero señaló la corrupción de Lozoya en el caso Odebrecht y Agronitrogenados, denunciando el personaje recibió sobornos por más de 10 millones de dólares.
Ni tarda ni perezosa (no en esta ocasión, al menos), la FGR anoche ya culpaba a jueces y a magistrados por autorizar que Lozoya siga su proceso en su hogar. “Son privilegios procesales totalmente injustos y desproporcionados”, anunciaron. Olvidan decir, que dado la enclenque investigación previa, esos “privilegios” los provocaron ellos.
Tanto Gertz Manero como Lozoya, maestros del engaño; la simulación por parte de la Fiscalía ayuda a la impunidad. Y, lo que es más, el caso de Lozoya es indicativo de una Fiscalía muy poco autónoma.
Esta triste etapa de la historia de México ‘que nos tocó vivir’ (Cristina Pacheco QEPD, dixit) incluye un episodio que bien podría titularse “El pato Pekinés y esa Fiscalía podrida”.
Giros de la Perinola
1.- La 4t arrastra una larga, muy larga, cadena de fracasos en la integración de carpetas. Unos por la indolencia de la FGR y otros por inventar delitos. Todos con la anuencia del Ejecutivo federal.
2.- El obradorismo no toca a Peña Nieto y colaboradores. Le basta y le sobra con culpar al Poder Judicial.
3.- ¿Y si en lugar de presionar con la reforma a la SCJN, mejor que sea a los ministerios públicos, a las procuradurías, a las fiscalías? No, eso no. Los afanes de AMLO nada tienen que ver con la democratización y el combate a la corrupción y a la impunidad en este país.