¿La Rosca de Reyes se come el 5 o el 6 de enero? Esto dice la tradición en México
La tradicional Rosca de Reyes es uno de los platillos más esperados del año debido a que se come únicamente en enero.
Sin embargo, ante el ansia de degustar este rico postre adornado con frutos secos, suele surgir la duda de qué día se come, si la noche de 5 o bien, por la mañana del 6 de enero.
¿Qué dice la tradición en México sobre la Rosca de Reyes?
En México, los Reyes Magos dejan en cada hogar regalos y juguetes para los niños, durante la madrugada del 6 de enero.
Esto, en representación de los obsequios que Melchor, Gaspar y Baltasar le llevaron al niño Jesús.
Al momento en que los Reyes Magos conocen al niño Jesús se le llama “epifanía”, y eso es justamente lo que representa la Rosca de Reyes.
Así, la tradición dicta que, toda vez que los menores se despiertan para disfrutar de sus regalos, la familia se reúne para celebrar la “epifanía”.
En consecuencia, es en la mañana del 6 de enero que teóricamente se parte y se coma la Rosca de Reyes.
Además, en México se acostumbra que las personas a quienes les sale el “muñeco del niño Jesús” en el pan, tienen la responsabilidad de cuidar de él y pagar los tamales del 2 de febrero, día de la Candelaria.
No obstante, la realidad es que la Rosca de Reyes comienza a venderse con hasta una semana de anticipación, por lo que los amantes de este pan suelen disfrutarlo días antes.
¿Qué representa la Rosca de Reyes?
Para los cristianos, la forma ovalada de la Rosca de Reyes representa el círculo infinito del amor a Dios.
Las frutas secas cristalizadas que adornan el pan, simbolizan las joyas incrustadas en las coronas de los Reyes Magos, mientras que el muñeco escondido, representa al niño Jesús.
Entre los ingredientes característicos destacan la naranja, el límón, higo y las cerezas, aunque en años recientes se ha generado una gran cantidad de variantes.
La Rosca de Reyes es una tradición que tuvo sus comienzos en la Edad Media, aproximadamente en el siglo XIV en países europeos como Francia y España.
Poco tiempo después, esta costumbre llegó a México durante la conquista.