Una heroína llamada Selene Ávila
Conozco a Selene Ávila desde hace unos 8 años. Para quien no está actualizado en noticias, Selene Ávila es diputada por Morena. El día de ayer en el Congreso alzó la voz ante el nulo presupuesto que Morena piensa destinar para la recuperación de Acapulco, las palabras de Selene Ávila fueron las siguientes: “Son unos traidores…. Si me cuesta el cargo, se los doy” dijo gritando y señalando a Morena como los culpables de no querer ayudar con fondos a los damnificados guerrerenses.
Por supuesto los mismos integrantes de la bancada de Morena intentaron írsele casi a los golpes, la trifulca se armó en ese momento, por demás vergonzoso.
Totalmente fracturado como partido, se desmorona Morena ante nuestros ojos, y lo que es peor es que entre ellos se pisen y se metan el pie dejando a un lado las necesidades graves de muchos sectores de la población.
Selene Ávila es morenista pero apoya a Marcelo Ebrard, es curioso, pero parecen hoy en día ser dos cosas muy diferentes.
En un momento en que Marcelo parecía ausente y desdibujado, Selene Ávila lo volvió a poner en el ojo del huracán.
Pero más allá de eso, Selene Ávila se volvió una heroína. Lo es ahora porque desde hace muchos años, la llamada oposición esperaba que alguien de Morena despertara y denunciara el horror y el desdén del partido hacia aquellos que tienen menos. Pero todos guardaban silencio o “callaban como momias” frase famosa del célebre Andrés Manuel López Obrador.
Aquí el tema es que, siendo Selene Ávila parte de la bancada de Marcelo Ebrard deja testimonio de que los morenistas no están con Marcelo sino en contra.
Por lo que todo lo que venga de Marcelo está siendo rechazado. El tema de Ebrard se ha vuelto personal contra López Obrador.
Selene Ávila lo vio y no se quedó callada.
Cuando supe que Selene era parte de Morena, conociendo de su gran corazón, su intuición y su inteligencia me pareció que tarde que temprano estallaría ante las injusticias y sí, pasó.
Hoy Selene Ávila tuvo el valor de alzar la voz, a sabiendas que puede ser expulsada de su propio partido.
Pero en realidad Selene debe de estar donde merece, donde sea valorada y donde su voz sea escuchada.
Marcelo Ebrard debe de sentirse muy complacido por tener de su lado a una aliada como ella, en tiempos en donde claramente se nota que para Obrador el excanciller pasó a ser parte de la historia de su vida, pues le ha quitado la vista y la atención, ha dejado en la orfandad a un Marcelo que prácticamente se está quedando sin ayuda alguna para contender por la presidencia.
Pero el tema no es ese.
El tema es que necesitamos más voces, más señales, más valentías y actos heroicos, y más héroes y heroínas.
Gente que sea la voz de otra gente. Gente que no calle ante la impunidad y la injusticia.
Gente como Selene Ávila.
Es cuánto.