¿Es Enrique Inzunza un político diferente?
Tenía otro tema para hoy, pero me hizo cambiar de opinión el par de páginas de entrevista editorial que El Debate en su versión impresa de este miércoles le dedicó al secretario de gobierno Enrique Inzunza Cázarez.
A priori, si lo es. Los últimos años las redes sociales y personajes que participan en la política a nivel mundial inclusive, nos han enseñado que el político debe tener características que le alejan del esquema “cuadrado” y en muchos casos se les exige a los líderes realizar acciones para ‘conectar’ con el electorado. Por ejemplo, bailar, cantar, ser dicharachero pues, subirse a una bicicleta, tomarse la foto en la taquería, y enumere usted todo ello que se le ocurra.
Pues bien, el “dos” del poder ejecutivo rompe ese molde y lo hace con una entereza inobjetable. En el tiempo que lleva como jefe de gabinete, el badiraguatense ha sido consistente en su comportamiento y maneras.
Si analizamos su lenguaje, es amplio en su léxico, pulcro en dicción e impecable en la sintaxis. En ese sentido, si valoramos su capacidad para comunicar, tiene un grado bastante alto para hacerlo. En el mensaje, más allá de lo que se dice importa mucho cómo se dice, y en cada intervención, Inzunza Cázarez emite seguridad, da certeza de ser un político al que se le puede creer, un funcionario en el que se puede confiar.
Su postura erguida, mirada de frente y gesto afable pero siempre un punto de serio, son características de un hábil comunicador, de quien ostenta un significativo grado de poder y de confianza en sí mismo.
Cada semanera que acompaña al gobernador, Enrique Inzunza nos muestra que tiene claro lo que trae en la mochila. No intenta hacer nada que le haga dudar de acertar y eso mejora ostensiblemente sus posibilidades de éxito. Juega seguro, juega fácil.
Cuando entrevisté a Santiago Inzunza, director general de COBAES, me confiaba un poco de lo agreste del camino que su hermano menor ha tenido que andar. Sin duda, un orgullo para la familia. Por lo que se ha podido conocer, su origen humilde que le ha hecho un hombre, mismo que ha tenido que forjarse a sí mismo ante la adversidad.
Su meta, construirse académicamente para lograr el éxito profesional. De ahí que supo abrazar al mundo del conocimiento y la experiencia en cada posibilidad que se le presentó, de su trayectoria podemos destacar que el secretario de gobierno fue dos veces magistrado del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Sinaloa.
No perdamos de vista que Inzunza Cázarez es un hombre que sabe utilizar sombrero, arremangarse la camisa, salir al monte, escuchar música norteña y hablarle claro a la gente. Un individuo común, pero para nada ordinario.
A Enrique Inzunza lo veremos hacer campaña política para el Senado, no lo veremos bailar, tampoco le escucharemos discursos graciosos y populacheros. Estoy segura de que el de Batequitas al igual que al mandatario sinaloense, será un político al que vamos a querer escuchar y poner atención, porque lo que diga, seguramente será de interés para el electorado.
X: @vanessafelixmx