Calaveras 2023. Episodio 4
Les platico en esta saga
las calacas de secuela
sus vidas se les apaga
aunque alguno se rebela.
Son políticos con suerte
porque siguen vivos todos
más depende de la muerte
del panteón sus acomodos.
Entre lápidas y flores
van en santa procesión
unos malos otros peores
se les acabó la acción.
Despojados de sus cosas
así pasarán los años
y de vidas mentirosas
no le hace que sean tacaños.
Benjamín Clariond
Más que dientes, colmilludo
hoy le toca a su heredera
de su habilidad no dudo
más de ella, pareciera.
Le hace un guiño cada año
la calaca del panteón
pero el Benjas es tacaño
no le alcanza pa´l cajón.
Marko Cortez
De sus panes ya no vive
se acabaron hace mucho
sus miserias hoy exhibe
aunque se crea muy ducho.
Está esperando su mortaja
le tomaron las medidas
por jugar mal la baraja
condolencias bien sentidas.
Alito Moreno
La bajada de Beatriz
fue su última trastada
lo aporrearon en el PRI
y pactaron su enterrada.
Le tendieron una cama
y cayó bien natural
hoy el fuego lo reclama
de su muerte hacen ritual.
Mario Delgado
Pocas cosas en la vida
son tan feas como éste
pero él se siente diva
y que nadie le moleste.
Gorro le vale a la muerte
no lo quiere en el panteón
le reserva muy peor suerte
por pasarse de mamón.
Ricardo Monreal
Le bajaron los calzones
al ponerse muy sabroso
aceptó las condiciones
y murió muy silencioso.
Su hermanito en Zacatecas
prende velas por doquier
evitar las cuentas secas
y que alcance pa´comer.
Lorenia Canavati
Esta dama, la del cedro
era muy entusiasmada
la enterraron en San Pedro
vestida de anaranjada.
Dejó suelto el festival
de Santa Lucía, seis meses
y de muerte comercial
fue a parar donde los peces.
Miguel Treviño
No está vivo, sigue muerto
se sospecha de un suicidio
de las trácalas experto
se salvó de ir a presidio.
Quería fuero con denuedo
pero nunca se le hizo
se murió más bien de miedo
y con un nombre postizo.
Luis Cresencio Sandoval
No lo quieren en la tropa
lo detestan en retiro
la muerte sobre él galopa
y se fue como un suspiro.
Fue su error, pero no tanto
aceptar esa encomienda
por hacerle caso a un tonto
el diablo se lo merienda.
Cajón de sastre:
“—” .