Veracruz y la zacatecana Nahle
En un acto violatorio a la ley electoral en Veracruz, la zacatecana Rocío Nahle -candidata de Morena a la gubernatura del estado, sin que reunir siquiera los criterios que exige la ley de residencia- organizó un acto oficial de campaña en el puerto mientras se realizaba el 5to. Congreso de Energía, Refinación, Gas y Petroquímica.
A la inauguración del Foro asistieron Manuel Bartlett Díaz, director de la CFE, el gobernador de la entidad, Cuitláhuac García, el nuevo secretario de Energía, Miguel Ángel Maciel, y los principales funcionarios del sector como el director de CENAGAS, el tabasqueño David Alipi Mena, el presidente de la CRE, Leopoldo Melchi García, el director de la ASEA y amigo de Andy López Beltrán, Ángel Carrizales y hasta el operador de las transas de CFE, el director de CFE Energía y CFE Internacional, Miguel Reyes, y por supuesto la protagonista del evento, la candidata morenista Rocío Nahle quien llegó con sus matraqueros, un centenar de acarreados y hasta con botargas promocionales.
El evento fue como todo un deja vu para quienes recordamos la película “La Ley de Herodes” protagonizada por el actor de la 4T, Daniel Alcázar, que se desarrolla en un país donde no hay más ley que la del presidente y la élite política.
Energía, política y cinismo
Evidentemente, para quienes manejan el sector, la política energética importa un bledo, la inauguración del Foro quedó como un acto político electoral al cual no asistieron los enemigos de Nahle, como el agrónomo, director de Pemex, Octavio Romero, ni los industriales o las empresas veracruzanas que no se prestan a hacer “el caldo gordo” a la zacatecana.
Cínicos, contradictorios y manipuladores, los discursos fueron contradictorios y con énfasis en la total ausencia de una política energética. Mientras Bartlett insistió al hablar de los supuestos “contratos leoninos de gas natural”; el nuevo secretario de Energía los considera una buena política y destacó la importancia de esos mismos contratos para el desarrollo del país.
Por otro lado, en lo que parece ser una asociación corrupta entre CFE con empresas consentidas de AMLO y de su hijo Andy, se habló de la canadiense TC Energy y de los mega negocios que hacen, como la autorización para ampliar el gaseoducto marino que llegará a Coatzacoalcos y Dos Bocas, inversión de 4.5 mmd en lugar de usar la infraestructura existente de Pemex que costaría menos de una cuarta parte; otra empresa es la estadounidense Sempra-ENova -su CEO es Tania Ortiz Mena sobrina de Carlos Salinas y su VP de Asuntos Jurídicos René Buentello Carbonell amigo de Andy López Beltrán y hermano de uno de los mayores defraudadores financieros del Grupo Mariscal, Carlos Buenrello- con la cual junto con otra empresas de la oligarquía, Grupo Carso con quien firmarán un contrato para llevar la molécula de gas natural a la Península de Yucatán a un costo mucho mayor. Mega negocios para los funcionarios de CFE y para estas empresas.
AMLO y su “no somos iguales”
Manipulando y mintiendo el presidente asegura: Antes, las élites neoliberales que gobernaban eran corruptas y saqueaban al pueblo; pero decidió destruir todas las instituciones de rendición de cuentas como el INAI y ahora busca inhabilitar a la SCJN.
Se dice “honesto” y que gobierna para los más necesitados, pero la desigualdad crece cada vez más y los más beneficiados son aquellos que él mismo definió como “la mafia del poder”, sus acciones de gobierno sirven para garantizar los negocios de Slim, Salinas Pliego, Carlos Hank, Carlos Peralta y muchos más de sus cuates.
Antes acusaba el “contubernio entre el poder político y el económico”, pero eso es justamente lo que se vio en Veracruz; ahora, afirma, los empresarios pagan impuestos y el gobierno no favorece a los más ricos; sin embargo, el Foro fue patrocinado por Sempra, TC Energy y la mexicana SIMSA propiedad de la familia Issa Tafich, a quienes el actual gobierno les permite construir en Yucatán y Sonora sin permisos, para comercializar el gas que Sempra y Carso donde monopolizan la cadena de suministro.
La designación de Rocío Nahle como candidata se dio por decisión del “dueño” del país y con el beneplácito de la oligarquía de la 4T, algo muy importante porque a cambio de contratos y negocios, brindan apoyo y financiamiento a las campañas de Morena. Acciones y decisiones que favorecen a la 4T, de las que, por supuesto, les pasarán factura.
Mentiras, manipulación, cinismo, corrupción y doble moral es el sello de Morena, de su dirigente Andrés Manuel López Obrador y de la élite política de su gobierno.
Pobres veracruzanos con la zacatecana que es tan pobre que solo tiene contratos y sus beneficiados para gobernarlos.